viernes, 28 de noviembre de 2008

Política: Nicaragua con una Dictadura a Colores

"Yo no quiero ser dictador. Ese no es mi oficio, sino ayudar a todos si fuera posible. Blancos o negros. Judíos o gentiles. Tenemos que ayudarnos los unos a los otros; los seres humanos somos así. Queremos hacer felices a los demás, no hacernos desgraciados. No queremos odiar ni dañar a nadie. En nombre de la democracia, utilicemos ese poder actuando todos unidos. Luchemos por un mundo nuevo, digno y noble que garantice a los hombres un trabajo, a la juventud un futuro y a la vejez seguridad. Pero bajo la promesa de esas cosas, las fieras subieron al poder. Pero mintieron; nunca han cumplido sus promesas ni nunca las cumplirán. Luchemos ahora para hacer realidad lo prometido". Esta cita NO corresponde a los discursos que la primera dama escribe para el Jefe de Estado y Líder del Partido, Comandante Daniel Ortega Saavedra, sino al discurso del Gran Dictador de Charles Chapil.  

La coincidencia del discurso del legendario comediante con la del máximo líder del supuesto FSLN es al menos llamativa y su aspecto también similar simpático. Son las consecuencias en la realidad las que diferencian el contexto de estos dos personajes. En Nicaragua se han perdido muchos espacios de libertad, eliminado derechos fundamentales y se han restringido hasta los mismos sueños de las grandes mayorías. Así se ha desarrollado en nuestro país en muy pocos meses una dictadura de verdad y a todo color. La lista de atropellos nuestras libertades y derechos a la democracia es tan larga que hasta a los más diestros se les olvida al menos la mitad. Esa es la buena noticia de esta historia, la mala es que lo que viene será aun peor. Esto último se puede afirmar tomando en cuenta, que todo lo que ha hecho este régimen lo ha logrado de manos atadas. Gracias a la decisión de la Cuenta del Milenio ahora el dictador Ortega tiene las manos libres, es decir de hoy en adelante que se salve el que pueda.

No hay comentarios:

Blogalaxia